Profundizaremos en esta cuestión en un artículo más extenso, pero como ya advertimos el 155 no es el desenlace previsto por el gobierno español, el objetivo último es la aplicación del 116.
El 155 que pondrá en marcha el gobierno, siendo un golpe encubierto, permitiendo al no estar desarrollado, el que CC-PSOE-Cs-CC puedan estirar sus posibilidades y transgredir su ámbito de forma absolutamente abusiva, tiene un solo y único problema, el gobierno español sabe que su aplicación no frenará la puesta en marcha y la defensa por la ciudadanía de la República Catalana.
Entonces qué pretende
Los cuatro partidos golpistas podrían haber pactado que, de “producirse un incremento de la escalada de tensión”, es decir, tras realizar el gobierno español todo tipo de provocaciones con el 155, que generen necesariamente huelgas y movilizaciones, acciones de todo tipo en defensa de la legalidad catalana y de la República, algún hecho de importantes proporciones, probablemente de “falsa bandera ” justifique o explique para una parte de la población española y para la comunidad internacional la declaración del estado de sitio o excepción.
Estrategas del golpe
Algunos de los estrategas del bloque golpista unionista habrían advertido que, mientras no se reprima e impida el apoyo social, se cercene la libertad de expresión, es decir, se intervengan todos los medios de comunicación que están con la República, se controle las redes, se garantice el que se anule o limite el derecho a reunión y manifestación, se prohíba el derecho a huelga, se coloque bajo la autoridad judicial y ejecutiva militar Cataluña, con el despliegue de fuerzas de élite, se realicen registros sin autorización, detenciones masivas de líderes en los diversos niveles, la situación no estaría técnicamente controlada, es más, esta secuencia y los tiempos para hacerse con el control deberían ser cortos, ya que consideran que si se extiende en el tiempo no está el éxito garantizado.
En resumen, el 155 es la avanzadilla de golpe, tras el 155 vendrá el 116. Se atisba con claridad un golpe a la turca de grandes dimensiones que, no sólo afectará a Cataluña, sino al resto de territorios.
Las elecciones dentro de seis meses no acontecerán y, según sus planes, serían con los partidos independentistas ilegalizados o gran parte de ellos.
Con 155 0 116 Cataluña será república. España solo conseguirá retrasar lo inevitable y pronto veremos como la nueva República será reconocida por diversos Estado en breve. España, como la conocemos, tiene los días contados.
Mañana el Senado firmará la desaparición de España, como en otros momentos de su historia, jamás ha sido construir un buen final.
En África, a 25 de octubre del año del kaos.